Las oposiciones son una lucha individual

Las oposiciones son una lucha individual

Hoy iniciamos el canal de videos ocultos de youtube. Sólo las personas que están apuntadas a la plataforma recibirán los enlaces de dónde se encuentren los videos. Podrán verlos, pero los derechos de explotación, grabación y transmisión no les corresponden a los usuarios sino a mí como propietario de los derechos de propiedad intelectual. Ni que decir tiene que,  obviamente, perseguiré legalmente a quienes difundan los videos a terceros sin mi consentimiento. Pero esto no se debe simplemente a un deseo legítimo de blindar mis derechos, sino a un planteamiento más general que quiero comunicaros hoy.

Sería bastante estúpido por parte de un opositor facilitar el video a un tercero por una razón obvia: le estaría facilitando a un potencial competidor una clave para que le derrote. Y esto, aunque sea una cuestión obvia, no quiero dejarla pasar, pues a menudo los opositores (sobre todo si son inexpertos) consideran un deber de solidaridad facilitar todas las informaciones sobre las oposiciones a sus amigos o compañeros de facultad para ayudarles por compañerismo o amistad.

Eso es entendible, pues cuando comenzamos a estudiar las oposiciones a menudo cometemos el error de creer que es lo mismo que la universidad o el instituto.  Y lo cierto es que las oposiciones no tienen nada que ver con cualquier otro tipo de estudio. Y aunque el sistema educativo nos ha enseñado a trabajar en equipo (y eso es positivo y necesario), no es ese el ámbito de la oposición. En la oposición las plazas son limitadas y sólo unos pocos obtienen su meta mientras que otros (por muy amigos o compañeros que sean) se tienen que conformar con volverse a presentar dos años después (con suerte de que sea así). Por tanto, cada convocatoria es decisiva y en cada ocasión hay que darlo todo para obtener el premio. Preparar las oposiciones en grupo o pareja es tan absurdo como preparar una entrevista de trabajo o jugar a la ruleta rusa por parejas. ¿Quién nos dice que la persona que  forma grupo con nosotros no acabará arrebatándonos una plaza compitiendo contra nosotros mismos?¿Quién nos garantiza que una vez obtenida fácilmente una información (un video, por ejemplo) ese amigo, no la difundirá entre más personas que también sean muy amigas suyas? Y al final, lo que puede ser un arma que nos diferencie de los demás y nos distancie un punto de nuestros adversarios (conocer los entresijos del comentario métrico, por ejemplo),  puede acabar siendo conocido por todos perdiendo ese punto que nos favorece. Por tanto, sólo un idiota difunde lo que le diferencia entre los demás.

¿Esto quiere decir que no se pueda asistir a una clase en una academia? No, pero sí hay que ser consciente de qué tipo de información compartimos, pues ya dice el dicho: “Lo que poco cuesta, poco se valora.”

Las oposiciones son una lucha individual en la que se obtiene una victoria personal y no colectiva. Y por tanto se deben preparar individual y personalizadamente. La vida quizá sería más bonita de otra manera. Pero es así y solo actuando en consecuencia obtendremos el triunfo.