En estos días, como Hamlet, hay miles de opositores en España haciéndose la misma pregunta: ¿merece presentarse a unas oposiciones en las que hay tan solo cincuenta plazas? Presentarse a unas oposiciones no es una cuestión menor. Serán tantas horas de esfuerzo y sacrificio que repercutirán además sobre nuestras parejas y familia que no podemos tomar la decisión a la ligera. Intentaré en esta entrada poner todos los elementos que hay en juego para ayudar a que cada persona tome su decisión con más conocimiento de causa.
En primer lugar, la cuestión básica a plantearse es que ser profesor es una decisión para toda la vida. Es una apuesta vital. Es decir, de lo que estamos hablando es de si nuestra apuesta vital es ser profesor o no. Esa es la primera cuestión y la gran cuestión a plantearse. ¿Queremos ser profesores? ¿Nos gustan sus condiciones salariales y laborales? ¿Estamos dispuestos a afrontar los retos de ese trabajo? Solo quienes tengan claro esta cuestión deben seguir adelante. Y en este sentido hay que tener en cuenta que se puede ser también emprendedor y montar nuestro propio negocio o trabajar en otra cosa. En algunos casos, la decisión será nítida. En los que no sea tan nítida (y se vea como una posibilidad otro tipo de trabajo o hacer nuestra propia empresa) no debemos opositar.
Ahora bien, si tenemos claro que sí queremos ser profesores, la respuesta es clara: hay que opositar cuanto antes y cuantas más veces mejor hasta alcanzar nuestro objetivo, nuestra apuesta vital. En este sentido hay que tener claras las siguientes cuestiones:
1- Estas oposiciones en condiciones normales suponen una media de dos a cuatro años estudiando. Llamamos a condiciones normales a que haya ejercicio práctico eliminatorio. Solo cuando este no se produce (y eso solo ha ocurrido entre 1990-1993 por la LOGSE y 2006-2008 por la LOE) es posible aprobar las oposiciones en un año. Por tanto, que nadie mire presentarse o no pensando en sacar la plaza en un año. Si además, como es ahora el caso, sacan pocas plazas, la media de edad para sacar la plaza son de cuatro a seis años de estudio. Yo me presenté por primera vez en 1993 y las aprobé en 1998. Cinco años de estudio. Hubo mucha gente de mi promoción que tuvo que esperar a 2000 y 2002. Es decir, que quien no esté dispuesto a recorrer un camino largo, no debe presentarse.
2- ¿Entonces para qué presentarse si no vamos a obtener plaza este año? Muy sencillo. Eso nos obligará a estudiar y a acumular temas, ejercicios prácticos y lecturas. Teniendo en cuenta que estudiemos unos 25 temas por curso (eso es la media que la gente suele estudiar), necesitaremos 3 años para llevar el temario entero. Es imposible afrontar la prueba de comentario con garantías reales sin llevar al menos unos 50 temas (es lo que llamamos temario oculto que debemos dominar para realizar los comentarios aunque no se nos p regunte directamente). Por tanto, cuanto antes empecemos a estudiar, antes alcanzaremos esa cifra. De ahí la importancia de tener un buen método de repaso como el que proponemos en opolengua.com.
3- ¿Y si cambian el temario y el modelo de acceso antes de que yo obtenga la plaza, por ejemplo, para 2016? ¿Servirá para algo lo que he hecho? Indiscutiblemente sí. Debemos empezar por estudiar temas que siempre estarán en el temario. Por muchos cambios que haya, el tema de la Celestina, el Cid, el Quijote o el sintagma nominal, siempre aparecerán en el temario. Si cambian será en pequeños matices. Estudiar esos temas siempre es una garantía de futuro. Igual podemos decir de los comentarios, por mucho que cambie el sistema de acceso, lo que es seguro es que nunca nos van a poner a hacer ecuaciones de segundo grado. Parece lógico que el comentario literario y lingüístico estén presentes en las pruebas. Siempre ha sido así y siempre lo será.
Finalmente, tampoco debemos ser fatalistas. Es posible, en estas condiciones sacar la plaza. De hecho, en julio de 2014 habrá centenares de personas que habrán alcanzado este objetivo.
Tú también lo puedes alcanzar si pones el esfuerzo, la ilusión y la fe que son necesarias. Por mi parte, yo pondré en opolengua.com todo mi trabajo para ayudarte en esta tarea.
Espero humildemente haberte ayudado a tomar tu decisión.
Saludos y ánimo.