Vamos a dedicar hoy la primera de las entradas dedicadas al análisis de las bases andaluzas de las oposiciones de 2014. Es tal la cantidad de información que contienen que hemos decidido parcelarla para hacer más fácil su digestión.
Lo primero que hay que señalar en torno a estas bases es que son las mismas que aparecieron en 2012 y que luego (por razones de todos conocidas) no se llevaron a la práctica.
En segundo lugar hay que hacer hincapié en que son eliminatorias. Hay un solo filtro. Un primer ejercicio que durará cuatro horas y media (que el opositor se puede repartir a su antojo) y que tendrá un tema (entre cuatro bolas) y un ejercicio práctico (dos comentarios a elegir entre cuatro). Sobre cómo encarar esta primera prueba ya haremos otra entrada en días venideros. Lo fundamental es señalar que esta oposición es eliminatoria. Y eso es muy importante, pues querrá decir que solo pasarán a la encerrona una parte muy pequeña de los que se presenten. Teniendo en cuenta lo ocurrido en otras oposiciones y habida cuenta de las 55 plazas, lo normal es que pasen en cada tribunal entre ocho y doce veces más opositores de las plazas que haya. Es decir, si el tribunal tiene dos plazas, pasarán entre dieciséis y veinticuatro opositores. Si el tribunal tiene 100 integrantes, aproximadamente entre 76 y 84 serán eliminados. Lo más importante de todo esto es que por primera vez desde hace ocho años, los opositores libres tendrán opciones reales de obtener la plaza, pues el interino que no domine este primer ejercicio (y muchos no lo dominarán) sucumbirá y no podrá hacer valer sus puntos de mérito por antigüedad.
Consecuencia uno: hay que sacar un 5 entre los dos ejercicios y se hace media a partir de que se obtiene un 2,5. Sacar un 2,5 en el tema es relativamente sencillo si se sabe medio bien. Pero entonces se necesita sacar un 7,5 en el comentario. Sacar más allá de un 7 en el comentario será muy muy difícil. Es preciso tener en cuenta cómo se corrige el comentario. Por mi experiencia, una vez elegidos los textos, los miembros del tribunal buscan ese comentario ya hecho en algún manual universitario. Suele aparecer el texto hecho. Hay millones de tesis y ahora con Internet esto es fácil. Claro, comparar un comentario hecho durante horas, días o semanas y con todos los medios a la mano (obras de consulta, diccionarios, internet) con otro hecho en hora y media y sin conocer el texto… pues ustedes dirán. Las notas son muy bajas y hay muchos suspensos. Mucha gente no ha hecho prácticas. Están eliminados salvo que tengan un muy buen tema.
Y ahora debemos pensar que un 60 o 70% de los opositores está empezando ahora a estudiar. Es ahora cuando la masa, al ver la convocatoria, toca zafarrancho de estudio. Algunos tendrán suerte o llevarán trabajo adelantado de otros años; pero, por norma general, esta gente tiene muchas posibilidades de estar eliminada. Hay que tener en cuenta que muchos interinos saben que seguirán trabajando. Y sobre todo, hay que tener en cuenta que en las catorce semanas que restan (Semana santa y ferias por medio) difícilmente llevarán bien llevados quince temas. Es importante llevarlos bien llevados porque si no, necesitaremos hacer un muy buen comentario (y eso es mucho más difícil). Y el que no tenga la suerte de que le caiga tema (con 20 temas llevados las posibilidades son del 75%) estará eliminado porque necesitará en el comentario un 6, un 7 o un 7,5. La masacre está servida.
Pero para los que pasen (que deben estar en buena lógica entre los que han estudiado estos cuatro larguísimos años como hemos señalado desde opolengua.com) la plaza estará a un paso (tras eliminar a otros quince o veinte aspirantes durante las encerrronas, por supuesto).
Y una vez pasemos a la encerrona, conviene darse cuenta de otra peculiaridad de las bases. La programación valdrá 0,3 y la unidad didáctica 0,7. Es decir, más del doble. Esto previene de aquellos que llevan programaciones ya preparadas o copiadas. Si no se sabe uno desenvolver bien en las unidades (que es donde se demuestra el trabajo) no habrá mucho que hacer. Muy importante es aquí que las bases señalan que “el tribunal valorará en esta prueba la exposición clara, ordenada y coherente de los conocimientos del personal aspirante; la precisión terminológica, la riqueza léxica, la sintaxis fluida y sin incorrecciones, así como la debida corrección ortográfica en la escritura.” Ojo a esto porque muchas personas serán eliminadas por su forma de expresarse oralmente. Quien no esté preparando esto con rigor, que lo vaya haciendo ya. Otra cuestión es que no se permitirán ordenadores ni móviles. Esto tiene gracia porque no sé cómo piensan evitar lo segundo sin cachear a los opositores o poner arcos como en los aeropuertos. Esperamos que no harán desnudarse a nadie, por lo que todo el mundo podrá llevarse su teléfono inteligente (que será una ayuda relativa).
