Complicada cuestión nos plantemos hoy, porque esta es la pregunta del millón de euros. ¿Qué hacer cuando todo el marco legal está en el aire? Este curso se abre con una inestabilidad política muy grande en la que la incógnita fundamental es quién gobernará España a partir de 2016 y en qué condiciones. Y eso, hoy por hoy, es muy difícil de predecir. Las tres variables más posibles a día de hoy son a mi entender, de izquierda a derecha:
- Gobierno PSOE-Podemos: Ya han anunciado que derogarán la LOMCE con lo que no sabemos qué legislación marcaría las oposiciones 2016. Probablemente la LOE, pues la LOMCE (aunque ha sido vendido como una ley nueva) es en realidad legislativamente es un desarrollo de la LOE, por lo que bastaría con derogar los artículos que desarrollaban la LOE para dejarla como antes.
- Gobierno PSOE-Ciudadanos. Aquí ya tenemos ciertas dudas pues el programa de Ciudadanos no dice hasta ahora nada al respecto. Hablan de un plan nacional de educación, lo que parece querer indicar que estarían por redactar una nueva ley. Por tanto, lo más posible es la derogación de la LOMCE.
- Gobierno Ciudadanos-PP. En este caso dependería de quién tuviera más votos. Si fuera Ciudadanos, probablemente se mantuviera la LOMCE, pero se realizaría una nueva ley para sustituirla. Pero como este proceso tardaría meses, las oposiciones 2016 se regirían por la LOMCE. Si el PP fuera el mayoritario, también habría una oposición «LOMCE».
Creo que las opciones de que PSOE o PP (o Ciudadanos o Podemos) gobiernen por mayoría absoluta están descartadas aunque nunca se sabe.
Ahora bien, hay que tener en cuenta que el PP ya ha anunciado que va a negociar con las comunidades autónomas el desarrollo de las reválidas. De esta negociación depende gran parte de lo que ocurra en las próximas oposiciones por lo que estaremos muy atentos a las mismas. Hay que tener en cuenta que si no hay reválidas, no tiene ningún sentido la existencia de estándares de evaluación (uno de los elementos más importantes del nuevo RD 1105/2014 que es el que desarrolla la normativa). Y sin eso, una parte importante de la programación debe cambiar.
¿Qué hacer? Pues yo recomendaría a la gente que ya tiene muy bien hecha su programación de otros años, que dedique ahora todos sus esfuerzos al estudio de temas y a comprender qué quiere decir programar por competencias. Asumiendo que cuando llegue enero y se conozca el plan del nuevo Gobierno tendremos que volcarnos en hacer una programación nueva por competencias, pero no habremos hecho un esfuerzo previo que puede resultar innecesario al final. Y a quienes no tienen hecha la programación, les recomendamos que la hagan al estilo que marca la LOMCE, porque si fuera derogada, tan solo se trataría de modificar cuestiones técnicas (objetivos y criterios).
Espero que este sencillo post haya ayudado a todo el mundo.
Saludos y ánimo.
