La prueba del comentario o ejercicio práctico es muy importante en la oposición. Solo haciendo un buen comentario podemos obtener la plaza. Hay que recordar en este sentido que algunas comunidades (como Madrid) ponderan el comentario dándole el 70% del valor de la primera prueba, dejando el tema en un 30%, por lo que la adecuada preparación de la misma es decisiva. El comentario consiste en explicar por qué el texto dice eso que dice (y no dice otra cosa) y de la manera concreta en que lo dice (y no de otra). Es decir, por qué el texto del Cid habla de guerra y de riquezas y por qué utiliza la rima asonante. De eso es de lo que trata en el comentario.
En la oposición contamos con un tiempo muy limitado para realizar el comentario (entre una hora y media y cuatro horas según la convocatoria). En muchas academias (o al menos en las más renombradas) tienen a reputados profesores que realizan unos comentarios perfectos. También las editoriales más prestigiosas y los más eminentes profesores universitarios tienen manuales de comentarios o libros de comentario de texto con decenas de comentarios ya resueltos. Es más, basta con echarle un vistazo a la Red para encontrarse con mil páginas de buenos profesores de instituto que cuelgan comentarios bastante buenos. ¿Pero es eso lo mejor que uno puede hacer para prepararse? Yo creo que no porque aquí de lo que se trata es de prepararse para una prueba muy concreta.
No se trata de enseñar a correr maratones con los ojos abiertos sino de enseñar a correr cien metros vallas sin tirar ni una sola valla en menos de quince segundos con los ojos cerrados. Y a eso no enseñan (por norma general) ni en las academias ni en los manuales de comentario.
Los opositores salen de la clase de la academia con el convencimiento absoluto de que su profesor es una lumbrera (y con la conciencia de que ellos mismos valen mucho menos y de que la prueba es muy difícil de superar). Para ese resultado no hace falta tanto esfuerzo.
Así pues de lo que tratamos en www.opolengua.com es de dar explicaciones concretas y proponer modelos concretos de cada tipo de comentario que se puedan realizar por el opositor y luego corregir los ejercicios prácticos que el propio opositor envía. Pues solo a través de la corrección es posible la mejora. Esas correcciones las realizo yo mismo o personas de mi confianza que han formado parte de tribunales en los últimos años.
El cuarto elemento son los exámenes. En las oposiciones es muy importante enfrentarse a los mismos textos de la oposición, en las mismas condiciones de la oposición. Y por ello cada uno de nuestros cursos de comentario cuenta con uno o más exámenes en los que te enfrentarás a los mismos textos que se pusieron en las convocatorias reales de oposición desde 1998 hasta la actualidad, porque son ya 16 años los que yo llevo preparando opositores con buenos resultados y he recopilado textos de las diferentes convocatorias.
Nuestros cursos de comentario integran los siguientes elementos:
1- Una serie de prácticas sobre los distintos tipos de pruebas que pueden aparecer en la oposición. Cada sesión de comentario consta de un video-tutorial explicativo (de una duración que ronda los 20 minutos), al menos una práctica corregida realizada por mí que sirve como modelo práctico para el opositor y un comentario que el opositor debe realizar y enviar para su corrección en formato Word. Algunos también tienen una batería de ejercicios auxiliares.
2. Exámenes basados en las pruebas reales de los últimos años. Cada examen es una prueba igual a la que se realiza en cada comunidad autónoma que el opositor deber realizar en el tiempo estipulado y enviar después para su corrección. Los exámenes siguen las mismas pautas de ejercicios ya planteados en oposiciones o incluso son exámenes de años anteriores, pues trabajamos con los textos que desde 1998 se han dado en las distintas comunidades. Siempre se proponen varios exámenes para que cada opositor puede elegir el formato de la comunidad o comunidades a las que se va a presentar.
¿Cómo se siguen nuestros cursos de comentario?
Nuestros cursos se siguen a través de una plataforma Moodle al ritmo que uno desee. Basta con conectarse en el momento y lugar que uno lo desee para ver los videos de clase las veces que uno necesite y analizar los textos-modelo y realizar los ejercicios de práctica.
Si te incorporas más tarde de la fecha, da igual, pues puedes avanzar a tu ritmo y realizar los exámenes cuando mejor te parezca. Te los corregiremos gustosamente en ese momento.