Eva ha aprobado este año brillantemente la primera prueba de las oposiciones de Lengua tanto en Castilla y León como en Navarra. Pero tuvo que optar por Castilla y León y obtuvo la plaza. Antes lo había intentado en tres ocasiones, con alguna experiencia traumática. Esta es su travesía completa.
Estoy seguro de que todo aquel que conoce a Eva Sacristán, se da cuenta pronto de que es una buenísima persona. Incluso diría que todos podemos ser muy buenas personas, pero es difícil superar a Eva. Por sus obras los conoceréis y así, quien lea su testimonio, lo comprobará.
Yo no soy tan buena persona como ella, pero la admiro y me identifico mucho con su historia. Ella cuida a su hermana; yo cuido de mi padre. Ella perdió la plaza en las oposiciones de Lengua de 2023 por los puntos de cursillos; a mí me pasó lo mismo en 1996. Ella asumió aquel varapalo con estoicismo y mostró su tenacidad y su entereza a prueba de bombas. Yo hice lo propio. A buen seguro que su fe, igual que a mí, le sirvió y le sirve para enfrentar los problemas que la vida nos interpone.
¡Enhorabuena a Eva y a sus alumnos!
Además de ser preparador de Lengua, yo he impartido clase desde 1990 y Eva compró mi libro de disciplina escolar, Cómo sobrevivir a la ESO y ser feliz. Así, Eva conoce mis métodos de disciplina escolar y dice que le han ayudado a manejar mejor la relación con sus alumnos. Por todas estas razones, además de sus conocimientos bien demostrados al aprobar brillantemente dos oposiciones de Lengua en esta convocatoria, estoy convencido de que sus alumnos de Castilla y León van a tener en ella un referente humano y docente que deberán amar y respetar. ¡Enhorabuena a Eva y a todos los alumnos que disfrutarán de sus conocimientos, valores, fortaleza y bondad en las próximas décadas!
Me llamo Eva y esta es mi historia
Me llamo Eva y soy una chica muy curiosa y creativa. No paro quieta. Leí El guardián entre el centeno con doce años y desde entonces no he dejado de devorar libros. Me gusta leer pero también escribir, dibujar, bailar, tocar la guitarra, ir al cine, sacar fotos… No os voy a contar mi autobiografía “con pelos y señales”, como Holden Caulfield, pero sí me gustaría que conocierais mi historia.
Tuve la suerte de estudiar Filología Hispánica y Comunicación Audiovisual
Tuve la suerte de estudiar Filología Hispánica y Comunicación Audiovisual. Después hice un máster propio en una escuela de cine. En el año 2019 comencé el Máster de Profesorado, que terminé en junio de 2020, sin que pudiera apuntarme a la convocatoria de las oposiciones de Navarra de ese año, que fue en febrero (esto es un dato a tener en cuenta, ya que después ni siquiera podría completar las de 2024).
Mi primera experiencia en la enseñanza: colegio concertado y problemas de disciplina
Unas cosas y otras me llevaron a trabajar durante un curso en un colegio concertado. Desde aquel año he trabajado tres como profesora, tanto en institutos como en FP, y desde entonces no me he encontrado con tantos problemas de disciplina como en aquel centro. Había días que volvía de trabajar llorando y sintiendo que lo último para lo que valía era para ser profesora. Estaba claro que no era mi sitio.
Mi primer contacto con Eduardo, mi preparador de Lengua
De hecho, a los pocos meses de empezar me planteé el tema de la oposición. En el fondo de mí estaba segura de que la lengua y la literatura me apasionaban y que, de una manera u otra, estaba llamada a ser profesora y quería hacerlo bien. Me habían hablado de Eduardo, así que lo llamé y en diciembre empecé a estudiar el tema 47.
Mi primera oposición: La Rioja 2021
Tras seis meses estudiando, me presenté por primera vez en La Rioja. Recuerdo que me salió tema, el 42 (la épica medieval), y un poema de Góngora que no supe comentar bien. Además, en La Rioja el tema todavía se lee en voz alta delante del tribunal y no tuve este factor lo suficientemente en cuenta: redacté el examen por epígrafes y creo que eso hizo la lectura mucho menos fluida de lo que podría haber sido. Si no me equivoco, creo que saqué un 4.9 en total.
Mi segundo intento en las oposiciones de Lengua: Madrid y Andalucía 2024
En 2022 no me presenté en ningún sitio. Volví a intentarlo en 2023, esta vez en dos comunidades: en Madrid y en Andalucía. ¡Vaya loca!, pensaréis. ¿Qué hace una navarrica yéndose a la otra punta de la Península? Eso mismo me preguntaba yo, pero es que en el sur había 400 plazas.
La experiencia en las oposiciones de Lengua en Madrid
En Madrid no me salió tema (improvisé uno sobre el sintagma verbal) y no debí hacer mi mejor comentario, así que no llegué a la fase de defensa.
La dramática y educativa experiencia en las oposiciones de Lengua en Andalucía
Y lo de Andalucía me da un poco de vergüenza contarlo, pero allá va. El caso es que una de esas 400 plazas era mía, porque saqué la nota suficiente. Recuerdo que hice el tema 7 (sobre historia de la lengua), en el que saqué un 7, y comenté dos de los cuatro textos a elegir (Tiempo de silencio y Entre visillos). Pasé a la fase de defensa de la programación, y la primera parte no fue del todo mal, pero la segunda estuvo lejos de ser buena. El caso es que saqué un 5 en esta parte. En total obtuve un 6,2 de media. Tengo puntos de idiomas, cursos, etcétera, por lo que con los méritos me daba para sacar una de las últimas plazas.
¿Qué paso entonces? ¿Por qué no estoy trabajando en Andalucía? Resulta que los méritos en esta Comunidad se introducen durante el mes de junio, a diferencia de otras comunidades, que siguen sus propios procesos. No me digáis qué pasó por mi cabeza, pero me confié y pensé haber hecho ya ese trámite. Y aunque no justifique nada, debo decir que en pleno junio estaba pendiente de otras cosas, como repasar para el examen, coger un tren, reservar un hostal…
Ojo con la atención a los puntos
Total, que los méritos no me sumaron ningún punto (una vez terminado el plazo no hay manera de hacer nada) y no saqué la plaza. La verdad es que he acabado hasta el gorro de tantas normativas diferentes, de los BONs, BORs y BOJAs, de estar pendiente de varios portales web de Educación a la vez, de tantas llamadas a las administraciones educativas (si me estás leyendo y eres administrativo, te saludo; probablemente hayamos hablado por teléfono…).
Lo viví como una valiosa experiencia
Curiosamente, lo viví con mucha paz interior y no me arrepentí de nada. Fueron experiencias valiosas que me llevé y que sin duda me permitieron hacer los exámenes de este año mucho más tranquila y preparada.
2024: Me inscribo en tres comunidades
Mi idea de cara a 2024 era inscribirme en Navarra, Castilla y León y Andalucía, y así lo hice. De nuevo, me iba a encontrar con dificultades. Para empezar, las fechas de Andalucía coincidieron con las de Navarra, por lo que descarté ir hasta allí. En Navarra y en Castilla y León los exámenes no me coincidían, así que decidí presentarme en ambos sitios. Cuando opositas, como podéis ver, no solo te preparas para ser profesor, sino que también desarrollas capacidades estratégicas napoleónicas.
Mis resultados en Navarra y Castilla León: el esfuerzo tarde o temprano, se ve recompensado
El caso es que salí del examen de Navarra con buenas sensaciones y en Castilla saqué buenas notas en la primera fase. En Navarra me decanté por La Celestina y en Castilla redacté el tema 59, sobre Benito Pérez Galdós, de quien he leído sus obras estos últimos años, disfrutándolas mucho; y el comentario fue un poema de Borges sobre el Golem. En Castilla el tribunal no lee los exámenes. Te citan para que lo hagas tú en voz alta. En esta ocasión redacté ambas cosas para ser leídas así, siguiendo consejos de Eduardo.. Saqué un 9 en el tema y un 8 en el comentario. Conclusión: el esfuerzo, tarde o temprano, se ve recompensado.
La exposición oral o encerrona, el mismo día en las dos comunidades
Al poco supe que estaba convocada para la defensa en Pamplona el día 15 a las 8:30. Calculé que en Castilla me llamarían un par de días más tarde, pero no acerté. ¡Imaginaos mi cara de incredulidad cuando vi que estaba citada en Castilla también el día 15 a las 8:30! No soy precisamente conformista, así que a la mañana siguiente acudí a la presidenta de mi tribunal y le comenté mi situación. Acabé hablando con el tribunal coordinador, que me dijo que, a no ser que me pusiera el día 15 de parto, no tenía nada que hacer. Simplemente le dije, sin saber si reír o llorar, que no me daba tiempo a ponerme de parto antes de ese día.
Opté por Castilla y León y obtuve plaza
Finalmente, como en Castilla había muchas más plazas que en Navarra y de esta última comunidad ni siquiera sabía mi nota, decidí hacer la defensa allí. Fui la última de mi tribunal y por eso al poco de terminar sabía lo que había sacado: tenía un 9. Con mis notas tenía plaza.
Lo más duro es el cansancio
Sin duda, lo más duro de todo este camino ha sido el cansancio. Se va acumulando y uno corre el riesgo de plantarse y abandonar. En mi caso, no he dejado de trabajar en ningún momento. Es muy fácil que el cansancio lleve a una persona a dejar de ser persistente. En mi caso, he trabajado de tardes, por lo que estudiaba por las mañanas.
Compatibilizar con la oposición de Lengua mis obligaciones familiares y mi trabajo
No tengo hijos, pero sí una hermana con una discapacidad de casi el cien por cien. Eso quiere decir que durante meses he madrugado mucho para asear a mi hermana y luego poder estar a las ocho de la mañana en la biblioteca estudiando o preparando la programación y las unidades (a día de hoy hay quien piensa que me gusta madrugar; ¡creo que es el momento de desmentirlo!). Quiere decir también que muchas veces me ponía a estudiar a las once de la noche porque no había podido estudiar por la mañana. En fin: siempre hay maneras de organizarse e ir sacando las cosas.
La dificultad con los repasos
Una cosa que también me ha costado muchísimo han sido los repasos. Soy muy inquieta y curiosa y todo lo que no sea nuevo o estimulante tiende a aburrirme. Me encanta estudiar y descubrir cosas nuevas y no puedo evitar aborrecerlos. Sin embargo, estos son esenciales para llevar al día el temario. No tardé en darme cuenta de que si estudiaba perfectamente un tema pero no lo repasaba hasta mucho después, podía darlo por perdido. De hecho, decidí dejar de estudiar temas nuevos durante unos meses para poder dedicar tiempo a rehacer mi programación según la LOMLOE, pero en ningún momento dejé de repasar los que me sabía. Es lo mejor que podía haber hecho.
Lo mejor es lo mucho que he disfrutado y dado
De todo lo que me llevo me quedo con lo mucho que he disfrutado y dado. Ha sido duro, pero he aprendido que las oposiciones son como la vida misma: estamos en este mundo para disfrutar, pero más incluso para dar y para convertirnos en la mejor versión de nosotros mismos y ayudar a los demás a hacer lo mismo. En gran parte me he preparado para poder dar lo mejor de mí a mis alumnos. Lo expresa muy bien Pablo Neruda en “Perdóname por ir así buscándote”: “Es que quiero sacar / de ti tu mejor tú”.
Sola no hubiera podido estar donde estoy
Y tengo la certeza de que sola no hubiera podido estar donde estoy. Para empezar, mi profesora de lengua, Charo Porto Llovo, me transmitió a mis quince años su pasión por la vida y la palabra (y lo hacía a través de la morfosintaxis, claro). Por otro lado, no puedo olvidarme de Santiago Arellano Hernández, que fue quien me enseñó a vivir a través de la literatura. Fue catedrático de instituto y una persona ejemplar en todos los sentidos. Recuerdo con cariño cómo nos acogía en su casa los martes por la tarde, una vez ya jubilado, y nos hablaba del Quijote y de la Celestina con su habitual sabiduría y sentido del humor. Yo tenía por entonces dieciséis o diecisiete años. De la época universitaria me llevo unos profesores increíbles y un bagaje que agradezco mucho.
MI agradecimiento a Eduardo y Opolengua
Y después llegaron Eduardo y su tripulación. Gracias a ellos he aprendido a hacer comentarios de texto. Ha sido Eduardo quien ha hecho llevaderos y asequibles los repasos. Gracias a su temario he podido partir de una buena base y sus vídeos me han permitido construir una buena programación. Y gracias a su experiencia he podido dar un nuevo enfoque a la disciplina en el aula. Si alguien no acaba de decidirse, le diría que no dudara en dejarse guiar por él y su equipo, pues no va a poder estar en mejores manos.