¿Cómo organizarse la semana de estudio de las oposiciones? El Plan de estudio semanal Opolengua.

¿Cómo organizarse la semana de estudio de las oposiciones? El Plan de estudio semanal Opolengua.

 

Una opositora me pregunta cómo se puede organizar el estudio. Y he pensado que es mejor contestarla por medio de esta entrada general de forma que luego cada uno pueda aplicársela a su caso concreto.

Comenzaremos p0r el final.

Día 7: Día de descanso.

El día de descanso es sagrado y debe ser respetado por el opositor en todas las semanas a expeción (si acaso) del día previo a un examen. Es decir, si nuestro día de descanso es el domingo y el examen teórico es un lunes, pues ese domingo se debe repasar. Pero salvo en esta circunstancia, el día de repaso es sagrado. Si todas las religiones y modelos de conducta tienen marcado un día de descanso no es por capricho, sino porque es necesario para todos los seres humanos relajarse mentalmente y reponer fuerzas, así como safisfacer nuestras necesidades sociales y afectivas. La oposicion es un proceso muy duro que debe incluir por tanto momentos de descanso. Mi día de descanso cuando era opositor era el domingo porque salía el sábado por la noche pero otras circunstancias vitales o incluso religiosas pueden aconsejarnos modificar esto. Lo fundamental es que haya un día de descanso. Ese día no estudio ni hago otra cosa que no sea gozar de la vida, que es hermosa y existe para nuestro disfrute.

Por la noche, eso sí, debemos leer literatura asociada al tema de literatura que estemos estudiando.

Día 6: Día de repaso.

Puede ser el sábado. Es más importante el repaso que el estudio. Esa es una lección vital. La semana que no puedo hacer nada, al menos repaso. El estudio es el avance a corto plazo; el repaso es la solidez, es lo que nos va a dar la plaza. Es absurdo estudiar sin repasar. Dicbo de otro modo, el repaso es más importante que el estudio. Y como vamos a estudiar cada semana menos temas de los que vamos a repasar (por lógica, pues cuando llevemos ya 20 temas, tendremos que repasar los veinte) necesitamos un método de repaso que nos permita solidificar lo que conseguido. Yo conseguí un método que me permitía repasar un tema en menos de diez minutos; a eso le debo mi plaza.

El día de repaso tomo los videos de repasos de la plataforma y realizo el repaso de todos los temas que ya llevo estudiados apuntando en mi hoja de control el tiempo y los fallos de cada tema. Esto es también fundamental.

Si me sobra tiempo, insisto con aspectos en los que pueda avanzar o me concedo más tiempo libre. Esta noche no leo.

El resto de la semana ya se puede distribuir de una forma u otra dependiendo del objetivo marcado en nuestro plan de estudio. Si hacemos dos temas a la semana podemos tomar como modelo este ejemplo. Al embarcarte en el Método Opolengua te realizaré un plan de estudio personalizado. Cada una de estas sesiones de trabajo puede oscilar entre 4 y 8 horas. Lo importante es no dejar el estudio hasta cumplir con el objetivo.

Día 1: Primera sesión de estudio del tema de literatura de la semana:

Puede ser el lunes. Leo el tema en cuestión. Tomo mi video-tutorial de explicación y lo veo. Estudio las primeras 14 diapositivas del tema siguiendo el Método Opolengua.

Antes de dormir: Leo una hora sobre una de las lecturas asociadas al tema de literatura que estoy estudiando.

Día 2: Segunda sesión de estudio del tema de literatura de la semana.

Puede ser el martes. Estudio las primeras 10 diapositivas restantes siguiendo el método Opolengua. Repaso brevemente el tema en 15 minutos.

Antes de dormir: Leo una hora sobre una de las lecturas asociadas al tema de literatura que estoy estudiando.

Día 3: Primera sesión de estudio del primer tema de lengua de la semana:

Leo el tema en cuestión. Tomo mi video-tutorial de explicación y lo veo. Estudio las primeras 14 diapositivas del tema siguiendo el método Opolengua.

Antes de dormir: Leo una hora sobre una de las lecturas asociadas al tema de literatura que estoy estudiando.

Día 4: Segunda sesión de estudio del tema de lengua de la semana.

Puede ser el jueves. Estudio las primeras 10 diapositivas restantes siguiendo el método Opolengua.

Antes de dormir: Leo una hora sobre una de las lecturas asociadas al tema de literatura que estoy estudiando.

Día 5: Sesión de trabajo.

Puede ser el viernes. Realizo la sesión de trabajo de la semana tal y como podría ser en la sesión presencial. Es decir, realizo mi control de estudio y mi comentario práctico o realizo mi examen en las mismas condiciones que en la oposición y lo mando por correo para su corrección. De esta forma, certifico semanalmente que estoy avanzando. Es decir, dedico entre dos y tres horas a las prácticas. Por otro lado, desarrollo mi programación y unidades si no están hechas o ensayo mi exposición siguiendo el videotutorial de Opolengua.

Antes de dormir: Leo una hora sobre una de las lecturas asociadas al tema de literatura que estoy estudiando.

En fin, este es modelo de trabajo general que yo seguí durante los años 1993-1998 hasta obtener mi plaza. Esa experiencia es la que ahora te brindo a través de esta página, disponiendo materiales y una plataforma de trabajo para que puedas personalizar y conseguir tu objetivo: obtener una plaza de profesor de Lengua para toda la vida.

1 comentario
  • Hola Eduardo.

    Desde que lo descubrí, soy fiel seguidora de tu blog. Quiero presentarme a las oposiciones de secundaria en 2014 -esperemos que se convoquen…- y estoy interesada en saber más sobre tu método de preparación. Además me gustaría plantearte alguna cuestión sobre mi situación y mis posibilidades de cara a la preparación de la oposición.

    Actualmente trabajo en un departamento en la Universidad, como becaria FPU, y estoy realizando la tesis sobre literatura. Siempre me había gustado la idea de ser docente, bien en enseñanzas medias o bien en la Universidad. Pero fue el curso pasado, mientras hacía el Máster de Secundaria, cuando descubrí que me encantaba preparar e impartir clase a alumnos de ESO y Bachillerato. Me apasionan la lengua y la literatura y, creo que al contrario que a muchos de mis compañeros de departamento en la universidad, me gusta profundizar en ambas materias. El reto de tratar que alumnos, en principio y en general desmotivados, disfruten mínimamente con aquello que les enseñas es un estímulo más.
    En fin, de momento estoy contenta en la universidad -aunque como bien sabrás aquí demasiadas veces alumno y materia son lo menos importante…-, pero siempre pienso con ilusión en la posibilidad de ejercer en secundaria.

    He analizado mi situación infinidad de veces, y calibrado mis fortalezas y mis debilidades de cara a la oposición. Entre las primeras incluyo mi trabajo en contacto con la literatura y, sobre todo, mis ganas y mi ilusión, que me hacen estar siempre mirando temas, programaciones, bibliografía, etc.

    No obstante, también contemplo bastantes «contras», que me hacen dudar de si, en mi situación actual, puedo tener alguna opción de preparar la oposición con mínimas posibilidades de éxito. No puedo dedicarle el cien por cien de mi tiempo, dado que la tesis y el trabajo en la universidad me absorben buena parte del día. Además, aunque esté acabando el Grado de Lengua y Literatura, la licenciatura con la que accedería no sería Filología sino Periodismo. Sé que al menos cuando lo acabe tendré un punto adicional en la fase de concurso, pero para 2014 no será posible. Tendré, por otro lado, cero puntos de experiencia, porque imagino que la docencia en universidad no puntúa…

    He leído (y esperado) cada uno de tus posts varias veces porque resultan muy motivadores. Sé que las condiciones en las que tú fuiste capaz de obtener tu plaza tampoco eran las idóneas pero, por otro lado, trabajando como interino se «repasa» el temario en las mismas clases, tal como cuentas.

    Imagino que te encuentras con gente que te pide consejo sobre si prepararse o no las oposiciones en situaciones no muy distintas de la mía… en el fondo aunque me dijeras que no me compensa o que en mi caso es difícil sé que lo haré igualmente. Aunque suene raro, me apetece realmente estudiar el temario y saber más sobre la materia que aspiro a impartir algún día.

    En cualquier caso, me gustaría leer tu consejo, saber en qué medida crees que es posible preparar «bien» una oposición sin poder dedicarle directamente todo tu tiempo y que me dieras más de información sobre tu método, porque de entrada me parece muy interesante.

    Saludos y mil gracias de antemano,
    LV.