¿Qué hacer los últimos días antes de las oposiciones?

¿Qué hacer los últimos días antes de las oposiciones?

Repasos Opolengua

Ya quedan muy pocas fechas para enfrentarnos al día D. Es ahora cuando nos cuesta más trabajo dormir, cuando las horas del día parecen alargarse y sin embargo resultar insuficientes para repasar todo lo que es posible repasar. Es ahora cuando sentimos la presión de todo un año de esfuerzo.

¿Qué hacer en estos momentos? ¿Qué aconsejar? Vamos a dar unos pequeños consejos.

En primer lugar, hay que intentar dormir bien. El descanso nocturno es la palanca sobre la que edificar jornadas de estudio intensivo. Mi truco para dormir bien es el desgaste físico. Hacer deporte es  muy beneficioso. Cuando caigamos en la  cama, debemos caer literalmente. Y si a pesar de todo no se puede dormir, ¡a repasar! Todo mejor qeu estar en blanco en la cama.

También hay que evitar las comidas copiosas que puedan llevarnos a largas digestiones en las que nuestro cerebro no tenga la máxima capacidad de concentración. Esto lo viví yo el día anterior a mi ejercicio escrito como narré en una entrada anterior de mi vida, con muy malas consecuencias. Hay que comer poco y cenar menos, como recomienda Cervantes en el Quijote.

¿Y durante el día? Repasar por tierra, mar y aire. Afortunadamente, en Opolengua los opositores cuentan con esquemas de estudio personalizados que siguen nuestro método de estudio y garantizan rápidos repasos. Solo hay que volver al tema si hay dudas en alguna de las ideas del mismo y esto ha de ser la excepción y no la norma.

¿Y qué hay que repasar? Pues hay que repasar los temas, esquemas claros de los comentarios y las introducciones a los mismos de cada una de las posibilidades. En estos repasos es cuando debemos insistir en la memorización de datos puros (fechas de obras y autores) que durante el año hemos descuidado un poco más.

Yo repasaba al principio todo el temario en tres días a razón de 24 temas diarios en dos tandas de 6 horas lo que quiere decir un máximo de 15 minutos por tema (aunque era menos). Luego en dos días repasaba otra vez el temario entero a razón de 36 temas diarios (a una media de diez minutos) y finalmente, el último día repasaba los 72 temas en un solo día dedicando menos de cinco minutos a cada tema. Es decir invertía en cada repaso diez horas diarias. Cuando se es interino es casi imposible hacer esto, porque no disponemos de diez horas diarias. Eso quiere decir que para hacer el mismo trayecto necesitaremos dos semanas y no una por lo que si llevamos el temario entero deberemos hacer los tres últimos repasos las dos semanas antes de la fecha del ejercicio.

Si se llevan menos temas de los que aquí aparecen, debemos adaptar nuestras horas de dedicación, pero el principio de que primero sean repasos de 15 minutos, luego de 10 y luego de 5 minutos es correcto.

¿Y si nos distraemos o nos cansamos?

A lo largo del año hemos tenido malos momentos estudiando, claro. Y los arreglábamos destensando  fuerzas, serenándonos, llevando la cabeza a otro sitio. esto podemos hacerlo pero no más de cinco minutos por hora. ¿Cómo apurar la concentración? Mi clave era pensar en mí mismo y verme como un titán, como un escalador, como un marinero que después de una dura travesía está a  punto de llegar a puerto. Nos hemos alejado de los nuestros, hemos mirado tantas veces desde nuestra ventana… ¡Han sido tantísimas horas de esfuerzo! ¡Hay que estar orgullosos de nosotros mismos! ¡Hemos hecho una gran proeza! ¡Donde muchas personas fracasan, nosotros hemos seguido en pie!

Somos perseverantes y fuertes. Y nos hemos ganado el respeto de los nuestros con nuestro esfuerzo. Gracias a nuestro ejemplo han sabido lo que es la fe, la constancia y la determinación. Pensemos en ellos en ese último gran esfuerzo. Démoslo todo y lleguemos al día D con la convicción de que hemos hecho todo lo posible. Hemos cumplido con nuestro deber. Y eso, creedme, no lo puede decir todo el mundo.

Un abrazo a todas las personas que se presentan este fin de semana a las oposiciones desde opolengua.com.