Carta de Patricia Bejarano Toro, número 2 de las oposiciones de Madrid 2021.

Carta de Patricia Bejarano Toro, número 2 de las oposiciones de Madrid 2021.

Querido Eduardo:
Como ya te he contado por teléfono y a través de mensajes, he aprobado la oposición con una nota fantástica y he sido la segunda de mi año de oposición, no puedo ser más dichosa y estar más agradecida por todo el trabajo que he hecho contigo.
Ya sabes que este año tomé la decisión de apuntarme al Curso Total en febrero tras unos meses complicados debidos a la pandemia y a mi situación laboral, a la que tardé tiempo en adaptarme por las dificultades del grupo del que fui tutora. En un momento determinado del curso tuve que parar y plantearme que no podía seguir con ese nivel de estrés y hacer algo para empezar a preparar la oposición. Fue entonces cuando decidí buscar a un preparador. Conocía tu blog y había consultado alguno de tus materiales en abierto años atrás y pensé en ti enseguida porque me parecía que tu trabajo era honesto y confiable.
Pasó una semana desde que tomé la decisión y empecé a trabajar en el curso. Esta era mi quinta convocatoria de oposiciones y las dos veces anteriores habían sido un desastre. Yo siempre había sido buena estudiante y había sacado muy buenas notas en toda mi trayectoria académica, por eso aquellos suspensos fueron dos jarros de agua fría para mí y me sumieron en una sensación de inseguridad que debía apagar.
Aunque empecé en febrero, el curso fue la mejor decisión relacionada con el proceso de oposiciones que he tomado en mi vida. Recuerdo esas llamadas en las que te hablaba de mis dudas, de mis dificultades para hacerme al método… Pero también recuerdo el orgullo y la satisfacción personal que sentí al terminar de estudiar el primer tema (¡el 47!) siguiendo el método y sentir que había aprendido tanto de mí misma, de mis límites y de la lírica renacentista. Recuerdo que cuando lo corregiste y me mandaste los resultados aprendí aún más de mis límites y de cómo mejorar para llegar a hacerlo perfecto. 
Agradezco mucho que tu curso haya sido un faro que me ha guiado en muchos aspectos. A pesar de los años de preparación de la oposición, hasta que no empecé contigo no descubrí cosas obvias que proponías para el estudio y que fueron vitales para ir tranquila y muy bien preparada al día D.
La única decisión de la que me arrepiento es de no haber empezado antes contigo, porque sé que habría aprovechado mucho más todos tus materiales, que me resultaron de buenísima calidad, prácticos y muy útiles para el fin que buscaban: llegar a hacer un buen tema y un buen práctico. También sé que si hubiera empezado antes podría haber tenido la posibilidad de haber tenido más comentarios y temas corregidos, algo que creo que es fundamental para saber el estado de preparación de cada opositor.
Ha sido un año muy difícil para muchos docentes. El año del trabajo semipresencial, de las mascarillas, de las horas dedicadas a preparar clases presenciales y virtuales y del tiempo robado a la familia para estudiar, preparar comentarios, avanzar con la programación. Sin embargo, siento que todo ese sacrificio ha merecido la pena y que tras siete años en el camino de la oposición, finalmente este ha sido el que más y mejor preparada, guiada y acompañada iba. Gracias a ti.
El día D cayó mi bola e hice unos comentarios muy buenos siguiendo tu método de comentario. La suerte y la calma estaban de mi lado. Esperé a los resultados y fui la mejor de mi tribunal. Luego me centré en rematar una programación para la que también conté con tu ayuda y experiencia y, finalmente, preparé la defensa con compañeras de otras especialidades, lo que me hizo aprender otras perspectivas y me enriqueció mucho también. Hace unos días supe mi nota, la mejor de mi tribunal de nuevo; excelente. Ha salido la lista de aprobados de nuestra especialidad de este año y estoy entre las mejores y sé que es así gracias a muchas circunstancias que se han dado a lo largo de la preparación, gracias a la suerte y gracias a mi preparación. Un porcentaje alto de mi aprobado lo debo a tu preparación, pero también (y sobre todo) a tu confianza y a tu apoyo emocional, ese que me ha hecho sentir desde el primer día que podría lograrlo y que una plaza era para mí. Lo que me ayudó a retomar la confianza en mi trabajo y estudio. 
Gracias, de corazón, maestro. Un abrazo fuerte,
Patricia.