Nueva categoría en nuestra página: Consultorio dudas Oposiciones de Lengua 

Nueva categoría en nuestra página: Consultorio dudas Oposiciones de Lengua 

Consultorio oposiciones de Lengua
Foto de Jim Cooke en Unsplash

Como ya anunciamos en una entrada anterior, este año inauguramos una nueva sección-categoría en nuestra página con la ilusión de que sea un punto de encuentro para todas las personas que preparan las oposiciones de Lengua Castellana y Literatura. Como bien sabemos los que estamos metidos en este mundo, la preparación de oposición es un proceso muy duro, en el que hay que hacer renuncias importantes y en el que surgen muchos imprevistos e inconvenientes que la vida nos va interponiendo. Por tanto, la resolución de dudas no se limita a cuestiones sobre el temario, el comentario de texto o la programación sino que afecta a la toma de decisiones estratégicas al hacer el plan de estudio o incluso para resolver cuestiones laborales, personales y familiares que siempre tienen relación con el estudio.

Una gran parte de mi tarea como preparador de Lengua consiste en resolver dudas

Esto hace que conteste muchas dudas. De hecho, una gran parte de mi tarea como preparador de Lengua consiste, precisamente, en resolver las dudas de las personas que preparo. Dedico a esto diariamente gran parte de mi tiempo, de forma que las dudas se contestan en el menor plazo posible, siempre en menos de 24 horas y casi siempre en un lapso mucho más breve. A veces minutos. Esto se debe a que estoy en excedencia. Ya indicábamos la semana pasada que esto es importante porque así evitamos que el opositor pierda tiempo en su preparación.

Un consultorio abierto a todos los opositores

Y ahora, mi intención es publicar una parte de esos correos (lógicamente, con el permiso de los opositores), pues creo que sus dudas podrán ayudar a muchas otras personas que tengan problemas parecidos. Pero va a ser también un consultorio abierto para cualquier opositor, por lo que si estás leyendo esto y tienes una duda, puedes escribirme a mi dirección elp@opolengua.com con el asunto CONSULTORIO y muy gustosamente te contestaré de forma pública.

Y hoy comenzamos con el siguiente correo.

Muy bien. Lo que me cuentas es normal. El inicio del estudio de las oposiciones de Lengua es siempre lo más difícil, porque el hábito de estudiar tiene que abrirse paso comiendo tiempo a otras actividades (más provechosas o menos) que antes hacíamos. Esas actividades ya existían previamente y la preparación debe ocupar su tiempo. Modificar un hábito es difícil y sustituirlo por otro todavía es más costoso. Ante esto, solo cabe una solución y es ser firme. El video “La concentración y la determinación al estudiar oposiciones” que está en el Curso de Estudio te puede ayudar mucho. Ahí desarrollamos las siguientes ideas:

  • • La base de la determinación es el pensamiento positivo: Tener claro por qué opositamos (obtener la plaza con lo que esta conlleva) y tener claro que vamos a obtener el triunfo.
  • • Aceptar que la recompensa a nuestro esfuerzo será diferida en el tiempo.
  • • Adecuar el espacio y el tiempo a las oposiciones en planes semanales, mensuales y anuales que deben revisarse cada semana.
  • • Evitar la autocomplacencia y la autocompasión.
  • • Focalizar en el triunfo.
  • • Darnos pequeños premios (salir con los amigos, ir al cine, disfrutar de un paseo) cada vez que obtenemos resultados.

Comprendo. Pero es muy importante mantener un día de descanso a la semana. La enorme presión a la que las oposiciones de Lengua nos someten necesita imperativamente un relajo, unas horas de descanso bien aprovechadas. Por tanto, en cuanto puedas, debes incluir en tu rutina ese día.

Genial. Es un paso importantísimo porque nos permite dar otros aún más ambiciosos. Como decía más arriba, la concentración es producto de todos los elementos señalados en la lista de arriba.

Es un buen ritmo. El mejor posible. Y más en tus circunstancias. Enhorabuena.

Muchas gracias por tus palabras. La verdad es que me esfuerzo todo lo que puedo y llevo en esto desde 1992 sin dejar de soportar la presión de las oposiciones, por lo que tengo una cierta experiencia tanto como opositor como preparador.
¡A por la plaza!