¿Qué textos cayeron en las pruebas de comentario de las oposiciones de Madrid 2023?

¿Qué textos cayeron en las pruebas de comentario de las oposiciones de Madrid 2023?

IES San Isidro. antiguo Colegio Imperial del Rey, donde estudió Quevedo. Foto de Eduardo L. Prieto

 El sábado 24 y el domingo 25 se desarrollaron las pruebas de comentario de texto de las oposiciones de Lengua Castellana y Literatura de Madrid tanto para las plazas de estabilización como las de reposición. Publicamos en esta breve entrada los textos que cayeron con sus preguntas y las lecciones que se pueden extraer de ambas convocatorias.

La singularidad de la oposición en Madrid

Hay que indicar que Madrid ha sido la única comunidad autónoma de España que ha mantenido el comentario de texto en las pruebas del concurso-oposición de estabilización, lo que supone que se trate del proceso más difícil y selectivo de este tipo en toda España. Hay que agradecer, por otro lado, el ejercicio de transparencia al publicar los textos que se plantearon en las oposiciones.

¿Cuáles fueron los textos de Madrid?

Los textos del concurso-oposición de reposición eran una seguidilla de Lope de Vega incluida en su obra El caballero de Illescas [hacia 1602], el cuento de Ana María Matute “El tiovivo” y el inicio del discurso de entrada de Juan Mayorga en la RAE.

Los textos del concurso-oposición de estabilización fueron el soneto de sor Juana Inés de la Cruz “A su retrato”,  un fragmento del cuento de Pardo Bazán “El encaje roto” y un fragmento del ensayo de Unamuno El secreto de la vida (1906).

El éxito y la utilidad de nuestro ¡Ponte a prueba!

Hay varios elementos que nos han llamado la atención de esta convocatoria. El primero es que salvo Juan Mayorga, todos los autores cuyos textos cayeron en las pruebas habían aparecido en nuestro ¡Ponte a prueba! e incluso habíamos comentado la posibilidad de que aparecieran en las pruebas del pasado fin de semana. Por un lado, nunca se había empleado en las pruebas un facsímil, tal y como nosotros solemos hacer (precisamente con Lope de Vega fue el antepenúltimo ¡Ponte a prueba! de este año). Y por el otro, tanto Pardo Bazán como sor Juana Inés de la Cruz (esta última este mismo año) habían aparecido en nuestro concurso y han sido citadas como claras posibilidades para las pruebas. Y no solo eso, sino que el texto que propusimos en nuestro último reto semanal fue precisamente un relato del mismo libro de Ana María Matute empleado en esta ocasión. Estos elementos nos animan a proseguir con nuestro reto semanal que inició su andadura en 2016.

Y ahora vamos con los textos y sus preguntas. Como siempre, ¡Suerte a todos! ¡Y a por la plaza!

Examen de reposición

TEXTO 1

Blancas coge Lucinda
las açuzenas,
y en llegando a sus manos,
parecen negras,
Quando sale el alua
Lucinda bella,
sale mas hermosa
la tierra alegra,
Con su Sol enjuga
sus blancas perlas,
si vna flor le quita
dos mil engendra,
Porque son sus plantas
de primavera,
y como cristales
sus manos bellas,
Y ansí con ser blancas
las azuzenas,
en llegando a sus mauos
parecen negras.

  1. Enumere las particularidades gráficas, fonológicas, morfosintácticas y léxico- semánticas del texto; ubíquelo en una época concreta y justifique su respuesta. (1)
  2. Análisis métrico del poema: medida y clase de verso, estrofa; rima; tipos de
    encabalgamientos; otras particularidades. (1)
  3. Con las conclusiones de estos análisis, así como el de los temas y de los recursos literarios empleados, sitúe el texto en un movimiento o corriente literaria y autoría. Justifíquelo de forma razonada. (1,5)

TEXTO 2

El niño que no tenía perras gordas merodeaba por la feria con las manos en los bolsillos, buscando por el suelo. El niño que no tenía perras gordas no quería mirar al tiro en blanco, ni a la noria, ni, sobre todo, al tiovivo de los caballos amarillos, encarnados y verdes, ensartados en barras de oro. El niño que no tenía perras gordas, cuando miraba con el rabillo del ojo, decía: “Eso es una tontería que no lleva a ninguna parte. Solo da vueltas y vueltas y no lleva a ninguna parte”. Un día de lluvia, el niño encontró en el suelo una chapa redonda de hojalata; la mejor chapa de la mejor botella de cerveza que viera nunca. La chapa brillaba tanto que el niño la cogió y se fue corriendo al tiovivo, para comprar todas las vueltas. Y aunque llovía y el tiovivo estaba tapado con la lona, en silencio y quieto, subió en un caballo de oro que tenía grandes alas. Y el tiovivo empezó a dar vueltas, vueltas, y la música se puso a dar gritos entre la gente, como él no vio nunca. Pero aquel tiovivo era tan grande, tan grande, que nunca terminaba su vuelta, y los rostros de la feria, y los tolditos, y la lluvia, se alejaron de él. “Qué hermoso es no ir a ninguna parte”, pensó el niño, que nunca estuvo tan alegre. Cuando el sol secó la tierra mojada, y el hombre levantó la lona, todo el mundo huyó, gritando. Y ningún niño quiso volver a montar en aquel tiovivo.

  1. Comentario literario del texto. A partir del análisis de los rasgos lingüísticos, temáticos y estilísticos del texto, determine y justifique su tipología textual, la posible época de escritura, la corriente estética de la obra y su autoría. (3,25)

TEXTO 3

Señor director, señoras y señores académicos:
La situación es tan teatral que, al anticiparla con su fantasía y temiendo estropearla, quien escribió estas palabras pudo sentirse tentado, mientras las preparaba en soledad, de pedir, como acostumbra, a un intérprete que las pronunciase en su nombre. Si no se decidió entonces, ha podido hacerlo en la última hora. Hay tantos cómicos hoy en esta casa que el autor del discurso puede haber encontrado fácilmente actor o actriz dispuesta a intercambiar con él posición e indumentaria. Es muy probable, sí, que quien ahora lee o finge leer estas palabras no sea el que las escribió, sino un representante.
Ocurre además que, bajo ese tragaluz al otro lado del cual habrá cielo o ciclorama, todo se aparece con la fantasmagórica intensidad propia del teatro. Bien podría ser ese vidrio un gran foco, si no es boca de la cueva de Montesinos o de la torre de Segismundo o de la caverna de Platón. A este lado del vidrio, es fácil sentirse ficción o sueño o sombra de otro más real.

  1. Análisis de los recursos lingüísticos utilizados para asegurar la coherencia, cohesión y adecuación, según la tipología textual. Vinculación fundamentada del mismo con un determinado movimiento, tendencia o autor. (1,5)
  2. Analice el uso de las perífrasis verbales en relación con el sentido del texto. (0,5)
  3. Analice sintácticamente el enunciado en negrita. (1,25)

Examen de estabilización

TEXTO 1

A su retrato
Este que ves, engaño colorido,
que, del arte ostentando los primores,
con falsos silogismos de colores
es cauteloso engaño del sentido;
éste, en quien la lisonja ha pretendido
excusar de los años los horrores,
y venciendo del tiempo los rigores
triunfar de la vejez y del olvido,
es un vano artificio del cuidado,
es una flor al viento delicada,
es un resguardo inútil para el hado:
es una necia diligencia errada,
es un afán caduco y, bien mirado,
es cadáver, es polvo, es sombra, es nada.

  1. Sitúe el texto en un movimiento o corriente literaria y justifíquelo de forma razonada a partir de los temas y los recursos literarios empleados. (2,25)
  2. Análisis métrico del poema, medida y clase de verso, estrofa, rima, encabalgamientos y otras particularidades. (1)

TEXTO 2

Llegó el día de la boda. A pesar de la natural emoción, al vestirme el traje blanco reparé una vez más en el soberbio volante de encaje que lo adornaba, y era el regalo de mi novio. Había pertenecido a su familia aquel viejo Alençón auténtico, de una tercia de ancho -una maravilla-, de un dibujo exquisito, perfectamente conservado, digno del escaparate de un museo. Bernardo me lo había regalado encareciendo su valor, lo cual llegó a impacientarme, pues por mucho que el encaje valiese, mi futuro debía suponer que era poco para mí. En aquel momento solemne, al verlo realzado por el denso raso del vestido, me pareció que la delicadísima labor significaba una promesa de ventura y que su tejido, tan frágil y a la vez tan resistente, prendía en sutiles mallas dos corazones.
Este sueño me fascinaba cuando eché a andar hacia el salón, en cuya puerta me esperaba mi novio. Al precipitarme para saludarle llena de alegría por última vez, antes de pertenecerle en alma y cuerpo, el encaje se enganchó en un hierro de la puerta, con tan mala suerte, que al quererme soltar oí el ruido peculiar del desgarrón y pude ver que un jirón del magnífico adorno colgaba sobre la falda. Solo que también vi otra cosa: la cara de Bernardo, contraída y desfigurada por el enojo más vivo; sus pupilas chispeantes, su boca entreabierta ya para proferir la reconvención y la injuria… No llegó a tanto porque se encontró rodeado de gente; pero en aquel instante fugaz se alzó un telón y detrás apareció desnuda un alma.
Debí de inmutarme; por fortuna, el tul de mi velo me cubría el rostro. En mi interior algo crujía y se despedazaba, y el júbilo con que atravesé el umbral del salón se cambió en horror profundo. Bernardo se me aparecía siempre con aquella expresión de ira, dureza y menosprecio que acababa de sorprender en su rostro; esta convicción se apoderó de mí, y con ella vino otra: la de que no podía, la de que no quería entregarme a tal hombre, ni entonces, ni jamás… Y, sin embargo, fui acercándome al altar, me arrodillé, escuché las exhortaciones del obispo… Pero cuando me preguntaron, la verdad me saltó a los labios, impetuosa, terrible… Aquel «no» brotaba sin proponérmelo; me lo decía a mí propia…. ¡para que lo oyesen todos!

  1. A partir del análisis de los rasgos lingüísticos, temáticos y estilísticos del texto, determine y justifique la posible época de escritura, la corriente estética de la que forma parte, la obra y su autoría. (3,25)

TEXTO 3

Hay por debajo del mundo visible y ruidoso en que nos agitamos, por debajo del mundo de que se habla, otro mundo visible y silencioso en que reposamos, otro mundo de que no se habla. Y si fuera posible dar la vuelta al mundo y volverlo de arriba abajo, y sacar a luz lo tenebroso metiendo en tinieblas lo que luce, y sacar a sonido lo silencioso, metiendo en silencio lo que calla, habríamos todos de comprender y sentir entonces cuán pobre y miserable cosa es esto que llamamos ley, y dónde está la libertad y cuán lejos de donde la buscamos.
La libertad está en el misterio; la libertad está enterrada y crece hacia adentro, y no hacia fuera.
Se dice, y acaso se cree, que la libertad consiste en dejar crecer libre a la planta, en no ponerle rodrigones, ni guías, ni obstáculos; en no podarla, obligándola a que tome esta o la otra forma; en dejarla que arroje por sí, y sin coacción alguna, sus brotes, y sus hojas, y sus flores. Y la libertad no está en el follaje, sino en las raíces, y de nada sirve dejarle al árbol libre la copa y abiertos de par en par los caminos del cielo, si sus raíces se encuentran, al poco de crecer, con dura roca impenetrable, seca y árida, o con tierra de muerte. Aunque si las raíces son poderosas y vivaces, si tienen hambre de vida, si proceden de semilla vigorosa, quebrantarán y penetrarán las rocas más duras y sorberán agua del más compacto granito.
Árbol espiritual de muchas y hondas raíces dará regalado fruto, por áspero y hostil que el ambiente le sea. Y las raíces son el secreto del alma.

  1. Analice lingüísticamente el texto. Justifique su tipología textual en relación con las características lingüísticas señaladas. (2.5)
  2. Analice sintácticamente el enunciado subrayado (1)